Punto 345 El Sabbat, culminación de la obra de los "seis días". El texto sagrado dice que "Dios concluyó en el séptimo día la obra que había hecho" y que así "el cielo y la tierra fueron acabados"; Dios, en el séptimo día, "descansó", santificó y bendijo este día (Gn 2, 1-3). Estas palabras inspiradas son ricas en enseñanzas salvíficas:
. El significado del Sabbat, el día en que Dios descansó. En la concepción bíblica el primer día de la semana es el domingo, litúrgicamente hablando, el primer día de la semana es el domingo. Sabbat es una palabra sagrada en la concepción bíblica, el hecho de que Dios descansase el día séptimo no era tanto una necesidad suya cuanto una pedagogía hacia nosotros. Dios no necesita descansar entre otras cosas porque no se cansa. El Sabbat es una enseñanza de Dios para recordarle al hombre para qué ha sido creado, el hombre tiene el riesgo de hacer del trabajo casi la única razón de existir y eso es un peligro, corremos el riesgo que el medio se convierta en el fin. Claro que el hombre tiene que llevar adelante la tarea de la vida, pero existe el peligro de la idolatría del trabajo. Frente a la idolatría del trabajo que no le da la centralidad a Dios, bajo esta pedagogía Dios pensó en el Sabbat, para santificar y glorificar a Dios y liberarse del riesgo de la idolatría del trabajo.
Punto 346 En la creación Dios puso un fundamento y unas leyes que permanecen estables (cf Hb 4, 3-4), en los cuales el creyente podrá apoyarse con confianza, y que son para él el signo y garantía de la fidelidad inquebrantable de la Alianza de Dios (cf Jr 31, 35-37, 33, 19-26). Por su parte, el hombre deberá permanecer fiel a este fundamento y respetar las leyes que el Creador ha inscrito en la creación.
. En Hebreos 4.3-4, se proclama solemnemente, litúrgicamente el Sabbat como el día del descanso. Ese recordatorio semanal, ese descanso de Yahveh el día séptimo, aquí se refiere como una garantía de que Dios es fiel, que no se arrepiente de la creación del mundo, es como si cada semana lo volviera a hacer, es como un lo hice, lo hago y lo volvería a hacer. Cierto que hay muchos problemas, muchos males, pero su decisión es firme.
Punto 347 La creación está hecha con miras al Sabbat y, por tanto, al culto y a la adoración de Dios. El culto está inscrito en el orden de la creación (cf Gn 1, 14). Operi Dei nihil praeponatur("Nada se anteponga a la dedicación a Dios"), dice la regla de san Benito, indicando así el recto orden de las preocupaciones humanas.
. La creación está hecha con miras al Sabbat, no el Sabbat, no el descanso con miras a la creación. El descanso es como la meta, también la vida eterna será un eterno Sabbat, un eterno descanso en Dios. Por eso para nosotros el aprender a descansar en Dios es todo un reto. Nos cuesta más descansar en Dios, despojados de nuestra actividad a la cual nos apegamos y no sabemos vivir la vida sin hacer cosas y sentirnos útiles, pero la meta no es esa, es el descanso en Dios. Saber descansar en Dios, saber poner en manos de Dios nuestros problemas, saber confiar y descansar, es fundamental.
. Dice S Benito: “nada se anteponga a la dedicación a Dios”.
Punto 348 El Sabbat pertenece al corazón de la ley de Israel. Guardar los mandamientos es corresponder a la sabiduría y a la voluntad de Dios, expresadas en su obra de creación.
. La voluntad de Dios la conocemos en la ley natural, en el respeto a la finalidad con la que Dios ha creado la creación. Utilizar la creación con sentido de prudencia, de solidaridad, aceptando compartir la creación, que yo no soy el único que está aquí. La ley de Dios está inscrita en toda la creación.
Punto 349 El octavo día. Pero para nosotros ha surgido un nuevo día: el día de la Resurrección de Cristo. El séptimo día acaba la primera creación. Y el octavo día comienza la nueva creación. Así, la obra de la creación culmina en una obra todavía más grande: la Redención. La primera creación encuentra su sentido y su cumbre en la nueva creación en Cristo, cuyo esplendor sobrepasa el de la primera (cf Misal Romano, Vigilia Pascual, oración después de la primera lectura).
. Este es el trasvase del Sabbat al domingo, del antiguo
testamento al nuevo testamento, los primeros cristianos que eran judíos
todos ellos pasaron de celebrar el Sabbat a celebrar el domingo, y esto tuvo
que ser un acontecimiento fortísimo. Qué
acontecimiento tan grande debió ocurrir ahí, en la vida de aquellos
judíos, para que entendiesen que había que dar un paso más en su vida, que
aquello que había sido inamovible en su historia pasaba al siguiente día.
. El paso del Sabbat al domingo supone asumir toda la riqueza de
espiritualidad que tenía el Sabbat que se conserva en la espiritualidad del
domingo, pero además se añade la resurrección de Jesucristo. En la redención de
Cristo encontramos la imagen del buen pastor que sale a nuestra búsqueda.
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